De romería en Gradefes

Ayer disfrutamos de un estupendo día de romería en Gradefes. A partir de las dos de la tarde fuimos llegando al chalet de las afueras del pueblo donde habíamos quedado. Finalmente nos reunimos un buen número de familias.


Mientras se preparaba la parrilla y reconocían el entorno, otros montábamos la red de voely para que los más chicos tuvieran la diversión asegurada. Rápidamente empezaron los partidos con resultados desiguales. En cuanto la parrilla estuvo lista, empezamos la comida: chuletas, salchichas, chorizo... Nadie pasó necesidad. Además las madres se esmeran para estas ocasiones y preparan postres especiales: tartas, bizcochos, etc. Incluso alguien sopló sobre una tarta de cumpleaños con once velas.

En la sobremesa Dani nos deleitó con su guitarra. Se ve que la actividad va dando su fruto. Después Pablo siguió con canciones divertidas. Mientras los guajes se divertían con la pelota, con la bicicleta, incluso se sorprendió a alguno con una consola de juegos.

Ya cerca de las seis de la tarde nos acercamos hasta el Monasterio de Gradefes, fundado en 1177 como cenobio femenino. Es un lugar realmente impresionante apartado de las rutas turísticas habituales. Merece la pena conocerlo. Allí rezamos el rosario, que en cualquier caso, era el motivo principal de la romería: honrar a la Virgen en el mes dedicado a ella.

Acabado el rosario, las monjas nos permitieron visitar el claustro del monasterio. El lugar es un ejemplo de orden y limpieza. Tiene un jardín central donde cultivan plantas medicinales.

De esta manera terminamos una jornada entrañable y divertida que además tiene su componente cultural. En contra de todas las previsiones tuvimos un tiempo magnífico, nada de lluvia y temperatura ideal. El próximo año probablemente repetiremos.
En flickr podéis ver las mejores fotos de la jornada.