12 diciembre, 2009

Disputas entre hermanos

En la adolescencia nace la intimidad y aparece la necesidad de comunicarla a alguien que nos merezca confianza. Esta confianza se suele tener en mayor medida con un amigo que con un hermano, porque ha sido escogido libremente. Cuando van pasando los años, los hermanos se convierten en personas a las que acudir y en las que confiamos si ha habido un trato cercano. Por esta razón es importante que haya una buena relación de cara al futuro.

Los motivos de las disputas

Las riñas entre hermanos son normales e inevitables. Es lógico que las personas que conviven entre sí compartan sus cosas y sus afectos, pero es muy difícil que siempre estén de acuerdo. Los pequeños conflictos les ayudarán a solucionar bien las disputas con las personas que no pertenecen a la familia. Los hijos deben aprender que no pueden vivir en continuas disputas.

Las causas más frecuentes de las riñas entre hermanos suelen ser:

- La rivalidad con respecto a tener o conseguir algo. Algunas veces se disputan el cariño de sus padres.
- No respetar las pertenencias del otro, usándolas sin permiso.
- La diferencia de costumbres cuando colocan algunos objetos.
- La envidia por algunas circunstancias concretas.

Algunos aspectos que influyen en las relaciones entre los hermanos

Los principales motivos que hacen que la relación entre hermanos sea mejor o peor son los siguientes:

- La edad: no suele haber rivalidad cuando los hermanos tienen mucha diferencia de edad.
- El orden que ocupa cada uno: el segundo hermano puede estar resentido con el primero por pensar que recibe menos atención de los padres, el penúltimo puede estar enfadado con el benjamín por la misma razón. El hermano mayor puede tener problemas con los más pequeños porque se le culpa a él siempre de todos los problemas.
- El carácter: puede haber caracteres más compatibles o menos. Dos hermanos autoritarios tendrán problemas entre sí.
- El sexo: discuten más los hermanos del mismo sexo por tener más relación. Las discusiones chico-chica suelen durar poco tiempo.
- El éxito en los estudios puede ser motivo de rivalidad con el hermano menos exitoso. Además puede ser un motivo de comparación de los padres dentro y fuera de la familia.
-Compartir habitación es una riqueza para la educación de los hijos porque fomenta la comprensión y la generosidad; pero también puede ser una fuente de continuas disputas.

¿Qué pueden hacer los padres?

El ambiente sosegado y tranquilo de los padres favorecerá la convivencia. Las disputas no van a desaparecer por decreto ley. Cuando los padres tienen poca paciencia y son autoritarios favorecen la agresividad entre los hermanos.

Las frases tales como ¿quién lo ha hecho? o ¿quién ha empezado? no solucionan el problema y convierten a los padres en jueces. Es preferible escuchar y hacerles ver que deben hablar del conflicto cuando estén más calmados, intentando llegar a un acuerdo. Si un hermano quiere ver un programa de la televisión y otro un vídeo y éste es el motivo de la discusión, se prohíbe a los dos ver la televisión. Esta será una consecuencia negativa por pelearse y la próxima vez intentarán llegar a un acuerdo.

Algunas sugerencias

Ante las disputas de los hijos, los padres deben evitar enfadarse sin saber qué ha ocurrido, reñir a los dos hermanos sin escucharles o tomar partido por uno de ellos. Es preferible actuar con tranquilidad. Deben enfocar su educación inculcando a los hijos la importancia de la fraternidad. Poco a poco y con paciencia habrá que enseñarles a ser sinceros, generosos, comprensivos, respetuosos, etc.

Algunas ideas concretas que pueden ayudar:

- No intervenir en todas las riñas.
- Procurar ser neutrales.
- Dar a los hijos la oportunidad de resolver ellos solos los conflictos.
- Escuchar a cada hijo por separado, antes de actuar, haciéndole reflexionar sobre sus posibles errores y disponiéndole a perdonar si es necesario.
- Relativizar los motivos de disputa.
- Procurar que los hijos estén siempre ocupados. Esto dificultará la aparición de riñas.
- No hacer comparaciones entre los hermanos en público.
- Demostrar cariño a los hijos.
- Procurar actuar con serenidad, ya que de lo contrario no se la podremos exigir a ellos.
- Fomentar el que los hijos se tengan detalles de generosidad entre ellos dándoles algunas sugerencias.

1 comentario:

  1. Hola yo e tenido una riña con un ermano por los sigientes motibos
    somos vecinos lindamos con los patios y por no acceder a que construiera unos balcones inlegales dejo de ablarme ami y ami familia
    es un dolor inumano pues emos estado mui unidos toda la vida espero que el tienpo nos una de nuebo

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